PEDRO SÁNCHEZ: CREDIBILIDAD 'DE CRUCERO'
#3afavor3encontra es un giro en este blog. Un análisis específico de determinados comunicadores. De personas (y personalidades) reales, experimentadas… y muy expuestas. El primer candidato era Donald Trump (pero por ahora va a seguir esperando turno).
Y seguimos al hilo de la actualidad, y hablando de políticos (y eso me lleva a la reflexión de si no estamos demasiado pendientes de lo que dicen –declaraciones, dimes y diretes-, y poco pendientes de lo que en realidad hacen… Pero eso sería tema para otro tipo de blog).
Hoy, el ‘renacido’ Pedro Sánchez, flamante ganador de las primarias del PSOE a quien todos daban por muerto, que regresa a la primera línea política (con visos de quedarse por bastante tiempo).
Vamos con el análisis:
#3AFAVOR
- confianza.- será el viaje de película por el que ha pasado –‘El héroe desterrado vuelve para vencer’-, será el reciente triunfo, o serán las horas de vuelo como orador que ha acumulado en los innumerables mítines estas semanas, pero percibo mucha más confianza en Pedro Sánchez. Lo veo más curtido, más seguro; y eso se traduce en resultados. No lo pierdas de vista: transmitir confianza en una presentación es un ‘must’ que no todos consiguen, pero que marca definitivamente la diferencia.
- actitud relajada.- Pedro Sánchez nunca expresa tensión o nerviosismo. Incluso en entrevistas comprometidas, o momentos complicados (que siempre los hay). Eso proviene fundamentalmente de su expresión facial, su mirada y esa media sonrisa que explota a menudo. Y es una valiosísima reflexión: los nervios siempre están (y es bueno, además, que estén) pero si dejamos que trasciendan se convertirán en los protagonistas de nuestra intervención. Reconócelos, respira, enfócate, sonríe y adelante.
- volumen.- un magnífico recurso de los muchos que tiene nuestra voz es el volumen. Podemos permitirnos subirlo o bajarlo (siempre dentro de la zona audible), y eso nos ayuda a remarcar ideas clave y a hacer nuestro discurso mucho más interesante. Pedro Sánchez cambia constantemente de volumen en los mítines, y eso hace las delicias de quien le escucha –aparte de reforzar mucho más sus ideas-.
#3ENCONTRA
- ritmo constante.- el amigo Sánchez varía el volumen con soltura, pero respecto al ritmo no varía en absoluto (y eso no es tan bueno). Querido Pedro: puedes hacer lo mismo que con el volumen con otras variables del paralenguaje (el ritmo, el tono) y así captarás mucho más la atención de tu audiencia. Esa velocidad de crucero invariable uniformiza demasiado tus palabras. Rasgo que, por cierto, compartes con Susana Díaz. ¿Habéis ido al mismo ‘cole’?
- 'manos blandas'.- las manos son un gran recurso para un orador. Y siento decirte que en tu caso los gestos no transmiten la fuerza que debieran. Algo que en algún sitio he oído llamar el ‘síndrome de manos blandas’. Transmitirías mucho más (y de forma más interesante) si permitieras que tus manos ‘hablaran’: si no se limitasen a estar al final del brazo, sino que precisaran y matizasen los conceptos.
- atriles.- muy relacionado con el anterior. Tantas horas hablando delante de un atril te han hecho mella, Pedro. No soy demasiado fan de los atriles, pero entiendo que en determinados momentos (o más bien determinados oradores) los usen. Ahora bien, no deberían ser un salvavidas: algo a lo que te agarras como tabla de salvación. Y eso es lo que parece en tu caso, limitando seriamente el movimiento de tus brazos. Suéltame, Pedro. Que nada se hunde. Permítete bajar los brazos, separarte un poco del atril y gesticular con más intención: los resultados te sorprenderán.
Y hasta aquí nuestro protagonista de hoy. Un revitalizado Pedro Sánchez que sabe transmitir confianza y serenidad, y a quien unos ‘toques’ de intención -especialmente en sus gestos- harían mucho más interesante.
‘A más ver…’